Domingo, Marzo 14
TORAJA – UJUNGPANDAN – INDONESIA.
Por la mañana, antes de desayunar partimos hacia un par de pueblos famosos por sus casas “ Tongkonan”. Estas curiosas casas de madera que recuerdan a un gran hórreo están llenas de significado y simbolismo. La parte principal se compone de tres habitaciones: the sumbung que es el dormitorio del jefe de familia, la parte central que también es la zona en la que duermen los hombres solteros, y la zona de las mujeres solteras. La cara norte del “ Tongkonan “ es el lindo puang: la cara de los dioses. Es por donde entran los dioses para ocupar el tejado. El tejado simboliza el mundo de los dioses.
El tejado se sostiene por dos postes verticales ( tulak somba ) que se decoran con dibujos geométricos y cuernos de búfalo. En el frente de la casa suele haber una talla de la cabeza de un búfalo que simboliza liderazgo. La casa es un microcosmos del mundo de los Toraja y todo su exterior está decorado en rojo, blanco, negro y amarillo con representaciones del Creador, el dios de la tierra, el dios del mundo oculto y los símbolos de la justicia, majestad, relaciones sociales, parentesco, protección de la gente, rituales y ofrendas a los dioses.
Después de visitar un mercado especialmente dedicado a los búfalos y cerdos; estos últimos que compran para criarlos en casa o simplemente para matarlos y comerlos, son atados fuertemente sobre una pequeña cama de bambú que atan a la motocicleta, el cerdo chilla y trata de liberarse y al final se deja llevar y descansa sobre el sillín de la moto que en gran número suben y bajan con sus cerdos por el barrizal de las calles sin asfaltar.
A media mañana emprendemos el regreso que nos ocupará nueve horas de autobús con un calor sofocante y las carreteras en construcción, es domingo y al atravesar pueblos y pequeñas ciudades el tráfico de motocicletas es denso, los puestos de frutas a lo largo de la carretera, barbacoas, confección de tartas y frituras se suceden interminablemente y la gente merienda o cena bajo tenderetes de cañas de bambú, familias con niños, grupos de jóvenes y algunas bodas donde la gente va bien vestida y los locales están adornados con flores. Al paso de algunos ríos la gente chapotea, se lava, o flota en el agua muchos de ellos vestidos refrescándose del calor intenso del atardecer.
Ya anochecido llegamos a Makassar para abordar el Clipper Odyssey.
No hay comentarios:
Publicar un comentario